Resumen de las evidencias
La Biblia
En Zacarías, capítulo 7, se dice que en el
año cuarto de Darío los judaítas llevaban ayunando 70 años en el mes quinto. En
dicho mes, según Jeremías 52:12, aconteció la destrucción del templo. Por lo
tanto los judaítas ayunaban y plañían en el mes quinto recordando la
destrucción del templo de Jerusalén acaecida 70 años atrás.
Dado
que el año sexto de Darío -en que fue concluido e inaugurado el nuevo templo-
correspondió al 515 a.e., el año cuarto fue el 517 a.e. Si al 517 a.e. se le
suman los 70 años que los judaítas llevaban ayunando, se llega al 587 a.e. como
fecha del arrasamiento de Jerusalén y su templo por Nabucodonosor.
La Biblia indica además que Nabucodonosor
destruyó la ciudad y el templo de Jerusalén en el año 18 de su reinado. Aunque
la Biblia no menciona fechas, ya que las fechas las dan los historiadores, sin
embargo al aplicar la cronología histórica a la Biblia, como es el caso de los
textos de Zacarías capítulo 7, se detecta que Jerusalén cayó ante Nabucodonosor
en el 587 a.e., año en que también fue destruido el templo.
Con relación a los 70 años de los que habla
el profeta Jeremías, estos no se refieren al destierro de los judaítas
capturados por Nabucodonosor en el año 18 de su reinado, cuando arrasó
Jerusalén y su templo.
Jeremías 29:2 indica que los setenta años
aplican en el caso de los desterrados del año 7 de Nabucodonosor, cuando
reinaba en Jerusalén Jeconías o Joaquín, y eso fue 11 años antes del reinado de
Sedequías. Es, pues, a los desterrados del año 7-8 de Nabucodonosor y no a los
del año 18-19 a quienes se dirige el profeta por carta.
Pero si los desterrados del año 18 de
Nabucodonosor hubieran estado 70 años en Babilonia, los desterrados del año 7
habrían estado 70 más 11 años, es decir, 81 años, lo cual es contrario a lo que
indica Jeremías 25:12, a saber, que el tiempo de servicio de las naciones a
Babilonia sería de 70 años, al cabo de los cuales se le pedirían cuentas al rey
de Babilonia, lo que significa que no habría de reinar más.
Las cuentas se le pidieron al rey Nabonido
en el año 539 a.e., cuando se cumplieron los 70 años de duración del imperio
absoluto de Babilonia tras conquistar definitivamente Asiria, hecho que sucedió
al tomar los babilonios la ciudad de Harrán en el año 609 a.e.
Por otro lado, el texto de Jeremías 29:10,
que muchos entienden que se refiere a los desterrados de Jerusalén del año 18
de Nabucodonosor, la mayoría de las biblias actuales lo vierten según la
preposición correcta que ha de traducirse de los manuscritos hebreos.
La preposición correcta en los manuscritos
hebreos es una de estas tres: ‘A, de, para’. Por tal razón las biblias hoy
traducen correctamente: ‘Cuando se cumplan los setenta años de Babilonia…’
(Nácar Colunga). O ‘Cuando a Babilonia se le cumplan los setenta años…’ (Biblia
de Jerusalén). O ‘Conforme se cumplan setenta años para Babilonia…’ (Traducción
del Nuevo Mundo en sueco, año 2002).
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